¿Porqué usarlos?

Los lubricantes son un complemento indispensable para vivir una sexualidad saludable, además de ser los mejores conductores de placer nos conllevan a humedecer, calentar, saborear, enfriar y facilitar la penetración; todo para un mayor disfrute solos o en pareja, con o sin juguetes sexuales. En el momento de escoger un lubricante debes tener en cuenta qué te gusta, qué quieres o qué te gustaría mejorar. Puedes usarlos simplemente para ayudar a la humectación de los genitales o también para cambiar su sabor, olor y temperatura.

¿Cuál escoger?

El uso de un buen lubricante permite mejorar cada experiencia sexual haciéndote sentir más placer, la gran mayoría son a base de agua, tienen consistencia ligera, no irritan ni alteran ph natural del cuerpo, se pueden usar con cualquier tipo de juguete, no tienen olor ni sabor y se difuminan fácilmente sin dejar huella.

También existen los lubricantes con sabor, aroma, y sensación térmica fría o caliente. Son geniales para explorar nuevas sensaciones al jugar a besar, lamer y masajear cualquier parte del cuerpo, son los más recomendados para hacer sexo oral porque quien lo hace disfruta su sabor y quien lo recibe su textura y temperatura. Son amigables con tu ph porque también son base agua.

Por ultimo los lubricantes más duraderos son los de base silicona, la textura es super sedosa, son perfectos para esos encuentros especiales bajo el agua porque no se diluyen fácilmente. También son ideales para practicar sexo anal ya que esta zona no tiene lubricación natural y su densidad se convierte en tu mejor aliado. No se recomienda combinar este tipo de lubricantes con juguetes siliconados.

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